IMM 53#

lunes, 30 de junio de 2014

"In my mailbox" es una sección nacida en Pop culture Junkie y que se extendió gracias a The story siren. Consiste en mostrar cada cierto tiempo los últimos libros adquiridos, ya sea comprados, regalados o enviados por parte de alguna editorial.





Últimamente quizá habréis notado cierto descenso en la hiperactividad a la que os teníamos acostumbrados en el blog, pero si hay algo por lo que merezca la pena disminuir las horas que paso entre semana delante de la pantalla es para dedicarme de lleno al desafío maratoniano de leer 30 libros en 30 días que se nos propuso desde el blog Book Eater. De momento, el reto progresa adecuadamente; la maquinaria precisa está completamente engrasada; los libros van desfilando ante mis manos a un ritmo acelerado; y aunque todavía no se discierne la meta, tampoco se perciben signos visibles de agotamiento. Eso sí, no seáis tan ilusos como para pensar que esta iniciativa va a servir para rebajar mi número de lecturas pendientes. Porque si hay algo que no ha de cambiar nunca, que se mantiene a pesar de los obstáculos, que permanece impasible ante cualquier eventualidad deportiva... es la afluencia incesante de nuevos inquilinos en busca de un refugio donde pasar cómodamente el estío. Démosles, pues, una cálida bienvenida: 



-Tierras rojas, Joe Abercrombie: Abercrombie se ha convertido poco a poco en el general de una auténtica legión de admiradores, muchos de ellos (entre los que me incluyo) convertidos en fieles incondicionales desde su primera experiencia con el autor. El último título del escritor británico que nos llega traducido a España es este Tierras rojas, nuevo spin off de su emblemática trilogía 'La Primera Ley' impregnado de un indudable sabor a western y con un amplio reguero de diversiones tabernarias que ofrecer a sus sedientos parroquianos. ¡Que no se acaben las rondas!


-Pastoralia, George Saunders: Son muchas las cosas que espero de este libro tras haber proclamado Diez de diciembre como una de las mejores obras que se publicaron el pasado año en nuestro país. Saunders no es solo un escritor magnífico; es también un observador brillante cuya soberbia y revulsiva reinterpretación de la sátira nos sitúa en escenarios difíciles de imaginar para el intelecto medio. Y gracias a la estupenda labor de rescate que Ediciones Alfabia ha emprendido en torno a la obra del autor nortemaericano, ya no hay excusas que valgan para seguir evitando esos pequeños tesoros de la ficción que son los cuentos de Saunders.


-La ciudad y la ciudad, China Miéville: Embassytown es otra de las novelas que figuraban en la lista de mejores lecturas que pasaron por mis manos en 2013, así que desperdiciar la oportunidad de agenciarme una novela de Miéville en formato bolsillo era un lujo que no me podía permitir. Tomando como punto de partida la resolución de un misterioso asesinato, Miéville nos conducirá por un extraño universo alternativo donde el peligro se esconde tras los reflejos, un delirante desfile de sombras, ciudades gemelas y organizaciones clandestinas que promete convertirse en una de las lecturas más trepidantes del presente verano.


-Máscaras de muerte, Jim Butcher: Quinta entrega de las aventuras protagonizadas por Harry Dresden y su problemática cohorte de criaturas sobrenaturales. La verdad es que no sé muy bien qué nos tiene preparado Butcher en esta novela porque tengo pendiente de leer el cuarto libro de la serie, pero lo que sí tengo claro es que si os gustan las historias trepidantes, impredecibles y con cierta vena macarra, id corriendo lo antes posible a por vuestro ejemplar de Tormenta. Os vais a divertir.


-Nunca olvidan, Alexandra Bracken: Por fin nos llega la esperada continuación de Mentes poderosas, una novela bastante diferente a lo que se suele encontrar dentro del género (mas por su desarrollo que por su argumento, todo sea dicho) y que supuso toda una sorpresa cuando lo leí allá por principios de año gracias a su carácter rompedor, su prosa ágil y su bien planteada sociedad. En esta ocasión, Alexandra Bracken nos hace regresar a un mundo distópico donde los niños son sometidos a crueles experimentos psicológicos con el fin de despertar en su interior extraordinarios poderes, un sistema corrupto y militarizado que nuestra protagonista tratará de destruir lo antes posible.


-Mañana todavía, Varios autores: El debate en torno a la palabra 'distopía' está de plena y candente actualidad. Es un tema que despierta opiniones diversas, dispares y controvertidas. Por eso resulta de tanto interés la apetitosa antología que ha preparado el equipo de Fantascy y que cuenta en su interior con relatos escritos por doce de los más reputados autores nacionales dentro del género. Laura Gallego, Emilio Bueso, Elia Barceló o Rosa Montero son solo algunos de los nombres que desfilan por entre las páginas de Mañana todavía, una pieza de indudable adquisición a la que cualquier interesado en escenarios apocalípticos y sociedades degeneradas hasta la médula debería echar un vistazo.


-El don, Mai Jia: La literatura china es uno de esos campos que permanecen mayoritariamente inexplorados por el lector occidental y desde el que de vez en cuando nos van llegando noticias. Os acordáis de Mo Yan, ¿verdad? Esta vez, el que promete convertirse en el fenómeno editorial chino de 2014 es Mai Jia, un señor cuyas ventas en su país de origen se contabilizan por millones (¿hay algo en China que no se contabilice por millones?) y que es artífice de este prometedor thriller protagonizado por un matemático experto en códigos y criptografía. ¡Guay!


-Un perfecto equilibrio, Rohinton Mistry: Publicada originalmente en 1995, la novela de Mistry es uno de esos raros especímenes de los que me enamoro sin previo aviso, sin conocimiento anticipado ni identificación concreta de las causas. Es un hallazgo completamente fortuito que reclama segundo tras segundo ser leído. Emplazado en una ciudad india de los años 70, Un perfecto equilibrio se sustenta sobre cuatro personajes unidos por el destino y atados por la necesidad, un cuadrilátero tembloroso que tratará de hacer frente a las dificultades de una época convulsa entretejiendo complejas aristas entre sus diferentes miembros. Una lectura larga, intensa y avalada por una legión de entusiastas críticas. ¿Se puede pedir algo más?


-El río sin retorno, Bee Ridgway: El debut de Bee Ridgway llama a mi puerta con una carta de presentación absolutamente inmejorable y situándose entre los primeros puestos de ese Everest particular que es mi lista de lecturas pendientes. Amor, guerra y viajes en el tiempo. ¿Que estarías dispuesto a hacer con tal de regresar a los brazos de un ser amado? ¿Hasta qué punto serías capaz de alterar las leyes del universo para lograr tus propios fines? Preguntas aún sin respuesta que hacen de El río sin retorno una historia de lo más apetecible. 


-Leyenda de un suicidio, David Vann: Con motivo de su quinto aniversario, Ediciones Alfabia publica por primera vez el debut íntegro de David Vann, ese en el que aparece una de sus obras más conocidas: Sukwann Island. Paisajes inhóspitos para inhóspitas relaciones paternofiliales parece ser el campo de especialización de este escritor norteamericano que fue catapultado a las más altas esferas por su capacidad de indagar en la soledad y el desarraigo familiar. ¿Será capaz de hacerme estremecer con su terrible fascinación por los ambientes opresivos?


-La brigada de la muerte, Joseph D'Lacey: Novela que apenas sobrepasa el centenar de páginas, pero cuya arrebatadora premisa me hizo desearla de manera inmediata. ¡Y además viene recomendada por Stephen King! Empleando un tono apocalíptico, Joseph D'Lacey nos sitúa en un escenario de horror y muerte donde cada noche un grupo de expedicionarios sale a masacrar todo cuanto encuentra a su paso. Siniestro es decir poco. 


-El gato que venía del cielo, Takashi Hiraide: No puede faltar un IMM sin su ración correspondiente y justamente merecida de narrativa japonesa. La novela elegida es una historia hermosa e imaginativa con sabor a fábula, una obra donde conviven felinos y humanos en una casa destinada a mantener lejos las preocupaciones de la gran ciudad. Pero como ya se sabe, los gatos son criaturas astutas e impredecibles que pocas veces traman algo bueno. ¿Cuál será el misterioso complot que esconde esta novela?  


-Un millón de gotas, Víctor del Árbol: La nueva novela de Víctor del Árbol parece estar cosechando un notable éxito entre quienes ya la han leído. Y no es para menos. En esta mastodóntica epopeya contemporánea, un abogado y padre de familia llamado Gonzalo se verá empujado a una turbulenta travesía emocional tras el suicidio de su hermana Laura, espiral en la que indudablemente terminaremos cayendo. Amor, traición, culpa y memoria son algunos recovecos de la condición humana que del Árbol se atreve a delinear en este ambicioso proyecto literario donde pasado y presente conviven, interaccionan y se confunden de forma irremediable.


-NOS4A2, Joe Hill: Mi antes fructífera relación con Stephen King está atravesando actualmente un inconcebible período de sequía. Sin embargo, puede que su hijo tenga a mano la llave de nuestro reencuentro. Nunca se sabe. Lo que sí parece claro es que la última novela de Joe Hill hasta el momento es un caramelo que nadie en su sano juicio se atrevería a rechazar. Aunque te lo ofrezca un extraño que deja abiertas las puertas de su coche. Y es que a lo largo de NOS4A2, Joe Hill sienta las bases de una milenaria lucha entre el bien y el mal que tiene como adalides a una infatigable ciclista capaz de encontrar cualquier objeto y a un extravagante individuo con el don de manipular a los niños, todo ello en el interior del parque temático más escalofriante del universo. ¿Quién diablos puede resistirse a un acontecimiento de semejante calibre? 


Y una vez más, hasta aquí llega el IMM de hoy. ¿Habéis tenido la oportunidad de leer alguno de estos libros? ¿Cuáles son los que más os llaman la atención? ¡No te olvides de dejar tu comentario! Nos vemos en la próxima entrega de In my mailbox.


Reseñas breves [51-53]

martes, 24 de junio de 2014

Legión y El alma del emperador, Brandon Sanderson
Fantascy - 240 páginas - 14.90 € - 

Lo mío con Brandon Sanderson podría definirse como una especie de amor platónico postergado hasta la extenuación por caprichosos avatares del destino, un espejismo idílico que, sobrealimentado por las excelentes críticas y las incesantes recomendaciones de muchos lectores, ha terminado difuminándose ante la demoledora realidad de una primera cita. Y todas estas expectativas medio frustradas se traducen en que los dos relatos del escritor norteamericano recogidos en este volumen no han conseguido deslumbrarme de manera tan contundente como cabría esperar, si bien es innegable su desbordante originalidad y el despampanante manejo de Sanderson a la hora de plasmar universos propios y nuevos usos del lenguaje. En Legión, un relato mucho más próximo a la ciencia-ficción que a la fantasía tradicional, les seguiremos la pista al extraordinario Stephen Leeds y a sus múltiples personalidades subyacentes en una vertiginosa contrarreloj que tiene como objetivo recuperar una cámara capaz de fotografiar escenas del pasado. Por otro lado, El alma del emperador nos sumerge en un escenario de profunda inestabilidad política donde a la protagonista, una reputada falsificadora de obras de arte, le será encomendada la tarea de estudiar los recuerdos, la personalidad y el comportamiento del actual emperador (en coma tras un desgraciado ataque) para construir una réplica de su alma que resulte indistinguible de la original. Frescura, intensidad narrativa y una soberbia caracterización de personajes podrían ser los alicientes más inmediatos para hacerse con un libro que no me ha cautivado, pero que resulta enormemente recomendable.


Las vírgenes suicidas, Jeffrey Eugenides
Anagrama - 232 páginas - 8.90 € - 

Lo de Eugenides es harina de otro costal. Mira que me lo habían advertido, pero ni todos los analgésicos del mundo podrían haberme preparado para resistir la tremenda, arrolladora, mitológica embestida que propina el tito Jeffrey en su primera novela. La historia, que gira en torno a la fatídica y casi legendaria cadena de suicidios que emprendieron cinco hermanas adolescentes en el transcurso de un solo año, resulta todo lo estremecedora e inquietante que podría uno imaginarse. Reconstruida dos décadas más tarde a partir del testimonio silencioso de vecinos, compañeros de clase y jóvenes perdidamente enamorados de estas ninfas inalcanzables, Las vírgenes suicidas supone tanto un alarde de creatividad literaria como un incomparable ejercicio de evocación, una oda al recuerdo de cinco muchachas prisioneras de un hogar sin afecto, compuesta por quienes sufrieron su enigmático influjo en los años dorados de la pubertad. Recuerdo pocos libros que me hayan tenido tan enganchado como este y en los que al finalizar su lectura te embargue una mayor sensación de vacío. Esta novela literalmente me dio escalofríos durante algunos pasajes, no sé si por la arrebatadora prosa de Eugenides o por el carácter grotesco de la propia premisa y la violencia implícita en cada uno de sus drásticos cambios de ritmo. Brutal, incontestable, etérea. Una novela deliciosa que se precipita de forma inevitable hacia un final que sabemos de antemano, pero cuyo efecto difícilmente se puede pronosticar.


Canadá, Richard Ford
Anagrama - 512 páginas - 24.90 € ½

No es muy habitual encontrar un libro donde destripen el contenido básico de la historia desde la mismísima primera página. De hecho, es una estrategia narrativa bastante arriesgada. En un mercado que solo busca complacer al lector poco espabilado, impaciente, de concentración laxa, la sola idea de atravesar 500 páginas de absoluta aridez argumental despierta un inaguantable sopor. A no ser, claro, que seas Richard Ford y tu novela se titule Canadá. En ese caso, no importa que el más impactante cliffhanger de toda la obra se situé al inicio del primer capítulo, no importa que las cartas estén siempre descubiertas sobre la mesa, ni importa tampoco que el hilo conductor de la historia sea en realidad una espiral que no cesa de dar vueltas sobre el mismo e inamovible eje. Porque ahí, amigos, es donde reside el auténtico encanto de esta maravillosa novela. Canadá proporciona un tipo de placer literario que no es apto para todos los públicos: un placer que se degusta lentamente y que proviene del excepcional relato narrado por un viejo profesor ya jubilado. El periplo existencial que emprendió Dell Parsons en su juventud a raíz del atraco cometido por sus padres es todo cuanto Ford esconde entre las páginas de su último trabajo; pero lo hace tan bien, de forma tan concienzuda, lúcida y sincera, a tantos y tan variados estratos, que no necesitarás nada más para captar a plenitud la desoladora así como emocionante vivacidad de esos momentos que tienen la capacidad de cambiarte la vida para siempre. Puede que Canadá no sea una novela espectacular en ninguno de los sentidos que priman en la industria, pero su tremenda puesta en escena, la profundidad y encanto de sus personajes o su absorbente y fatídica atmósfera boreal la convierten en una opción sencillamente imprescindible.


Reseña "Aniquilación"

miércoles, 18 de junio de 2014

Título: Aniquilación
Autor: Jeff VanderMeer
Saga: Southern Reach #1
Año: 2013
Editorial: Destino
Páginas: 240
Precio: 17.50 €

En un futuro no determinado, el Área X es un lugar remoto y escondido declarado zona de desastre ambiental desde hace décadas. La naturaleza salvaje ha conquistado el lugar y su acceso está prohibido. La agencia estatal Southern Reach ha enviado diversas expediciones pero casi siempre han fracasado: todos los miembros de una expedición se suicidaron; otros enloquecieron y acabaron matándose entre sí, y los integrantes de la última expedición regresaron convertidos en sombras de lo que un día fueron.
Ésta es la expedición número doce. El grupo está compuesto por cuatro mujeres: una antropóloga, una topógrafa, una psicóloga y la narradora, una bióloga. Su misión es cartografiar el terreno y recolectar muestras, anotar todas sus observaciones tanto de su entorno como de sus compañeras. Pronto descubren una gran anomalía geográfica y formas de vida más allá de todo entendimiento. Mientras se enfrentan a una naturaleza tan bella como claustrofóbica, el pasado y los secretos con los que cruzaron la frontera se vuelven cada vez más amenazantes. 

Opinión

Como todos sabréis, Southern Reach es una trilogía que viene sobrevolando peligrosamente nuestras cabezas desde principios de año, uno de esos mediáticos fenómenos editoriales de los que no sé sabe muy bien qué esperar por culpa de su carácter transgresor y que consiguen despertar de todo menos indiferencia entre los lectores de curiosidad inquieta. Ahora que a su primera parte por fin le ha llegado el turno de aterrizar en nuestro país, la misteriosa obra en tres actos de Jeff VanderMeer continúa acaparando la atención de propios y extraños mediante una propuesta que no sé si calificar de atractiva, sugerente, rara o directamente rocambolesca. Lo que sí tengo muy claro es que Aniquilación, con todos sus pros y sus contras, con sus desconcertantes extravagancias y sus ocasionales medianías argumentales, es un libro que puede presumir alegremente de estar adscrito a ese distinguido círculo de celebridades literarias que cada año merecen ser rescatadas de las estanterías.

VanderMeer nos presenta en este primer volumen a un grupo de expedicionarias (una antropóloga, una topógrafa, una psicóloga y una bióloga) que se adentran en las profundidades de una zona denominada como el Área X, un emplazamiento remoto que ha sucumbido ante los efectos de una extraña catástrofe medioambental y que está siendo estudiado por una corporación bastante sospechosa llamada Southern Reach, encargada de enviar periódicamente partidas de científicos dispuestos a explorar lo desconocido. El problema es que todos y cada uno de los grupos destinados al Área X acaban de manera catastrófica, sus miembros suicidándose, matándose unos a otros o regresando a casa en un estado de absoluta enajenación mental. ¿A que suena bien? ¿Qué es eso tan enigmático y mortífero que se oculta dentro del Área X?

La torre, que en principio no debía estar ahí, penetra en el suelo justo antes de que el bosque de pinos negros empiece a dar paso a la marisma, y luego a los juncos y a los árboles torcidos por el viento de los llanos pantanosos.

Relatado por la bióloga a modo de diario (usando un estilo refinado, detallista, de una aterradora belleza), Aniquilación nos sumerge en un entorno fascinante e ignoto, pero también sumamente amenazante y claustrofóbico; una especie de purgatorio ecológico al más puro estilo Lost donde nuevas formas de vida adquieren el cariz de una pesadilla extraterrestre y hasta los más sencillos conceptos ya asimilados se tambalean bajo el efecto de una atmósfera que retuerce y envenena nuestro conocimiento de la realidad. De hecho, es precisamente la componente psicológica de la novela uno de sus mayores fuertes, no solo por ver cómo desestabiliza y determina la relación entre las cuatro protagonistas esa creciente paranoia a la que nos somete VanderMeer, sino por la excelente caracterización de lugares que cobran identidad ante nuestra expectante mirada (la torre hundida en el suelo, el faro abandonado, la propia Área X) o por la manera en que se indaga a modo de reveladores flashbacks en el pasado de la bióloga, una mujer ciertamente atormentada en la que no siempre se puede confiar.

Ahora bien, Aniquilación no es ni mucho menos lo que se dice una lectura fácil. Es un libro que parte de una base enmarcada en el género de la ciencia-ficción, pero que se va abriendo hacia nuevos horizontes fronterizos donde muchos lectores no se sentirán especialmente cómodos. La exasperante falta de información que gira en torno a casi cualquier apartado argumental, el planteamiento ininterrumpido de grandes interrogantes o el tono excesivamente impersonal de la narración podría bastar para que el estrecho recorrido que hay entre el principio y el final de la novela se convierta en una empinada cuesta. No obstante, también ha de tenerse en cuenta que estamos ante el inicio de una prometedora trilogía y que muchas de esas preguntas planteadas todavía no han de responderse porque no contamos con las palabras apropiadas. ¿Acaso es casualidad que la lingüista abandone la expedición antes incluso de que esta dé comienzo? ¿No será el lenguaje y su alta plasticidad una de las claves futuras para entender los entresijos del Área X? Personalmente, estoy convencido de que Southern Reach es una saga que dará mucho que hablar a lo largo de este año y que habremos de volver a recorrer las escarpadas sendas de Aniquilación para alcanzar una compresión completa de lo que VanderMeer quiere contarnos con esta fabulosa historia. A mí, de momento, me tiene completamente embelesado.  

Puntuación

Aniquilación, Jeff VanderMeer



Reseña "Vicious"

martes, 17 de junio de 2014

Título: Vicious
Autor: Victoria Schwab
Saga: Vicious #1
Año: 2013
Editorial: Tor Books
Páginas: 364
Precio: 16.94 $ (Bookish)

Victor and Eli started out as college roommates—brilliant, arrogant, lonely boys who recognized the same sharpness and ambition in each other. In their senior year, a shared research interest in adrenaline, near-death experiences, and seemingly supernatural events reveals an intriguing possibility: that under the right conditions, someone could develop extraordinary abilities. But when their thesis moves from the academic to the experimental, things go horribly wrong.

Opinión

Sí. Yo también soy de esos que oyeron hablar por primera vez de esta novela en el blog Arias de agua. Soy de los que han sufrido el constante (bueno, tampoco tanto) bombardeo publicitario de su administradora y han acabado sucumbiendo ante el influjo de una reseña que solo puede calificarse de entusiasta. Pero es que madre mía. Qué libro. Si sumáramos la poderosísima imaginería popular de Héroes, los retorcidos varapalos psicológicos que abundan en American Horror Story y el irresistible carisma de unos personajes absolutamente marvelianos, tendríamos como resultado el fabuloso despliegue de fuerza narrativa que Victoria Schwab lleva a cabo en Vicious, una historia trepidante, ambiciosa, inteligente y bien construida donde el destino de la humanidad recae sobre las manos de dos individuos un tanto desequilibrados, dos viejos amigos con sed de venganza que están dispuestos a cualquier cosa con tal de defender sus ideales.

Así pues, lo primero que llama la atención de Vicious (si es que la impresionante puesta en escena no es suficiente para que tus glándulas salivales comiencen a funcionar) es su inusual estructura. Aunque el período de tiempo que abarca la historia es de unos diez años, la novela huye de toda linealidad imaginable intercalando capítulos del presente y el pasado de los protagonistas que además están distribuidos de manera aparentemente aleatoria. Sin embargo, este continuo trasiego en la línea temporal no consigue confundir ni distraer al lector, sino que aumenta su apetito por conocer los oscuros motivos que impulsan a los personajes en sus respectivas cruzadas personales. La de Victor, un brillante científico que acaba de escapar de prisión, localizar al hombre que lo encarceló y acabar con su vida. La de Eli, un hombre atormentado por un experimento traumático, librar al mundo de lo que él cree que es una pesada carga. En ese sentido, Vicious es una novela planificada al milímetro, una novela donde cada golpe se propina en el momento preciso y cada truco produce el efecto óptimo; una obra magnífica que indaga mucho más en las causas de ciertos actos que en las propias consecuencias de los crímenes perpetrados.

Plenty of humans were monstrous, and plenty of monsters knew how to play at being human.

Sin duda alguna, uno de los atractivos más inmediatos de la novela es ir descubriendo cómo se enturbió la relación de Victor y Eli ya en la universidad, cuando ambos se embarcaron en un proyecto que tenía como objetivo establecer relación entre sujetos que habían sufrido experiencias cercanas a la muerte y la proliferación en estos últimos de habilidades que hoy día etiquetaríamos de sobrenaturales. No en vano, la muerte y nuestra necesidad de acotar su influencia sobre los vivos es uno de los temas de los que más largo y tendido se habla en Vicious, dejándose caer en numerosos capítulos interesantes reflexiones sobre el carácter divino de la inmortalidad, la -en apariencia- insalvable enemistad entre religión y ciencia o los sacrificios (propios y ajenos) que seríamos capaces de realizar con tal de cumplir una meta largo tiempo soñada. ¿Ambición u obsesión? ¿Curiosidad académica o fascinación morbosa por los reinos ultraterrenos? Y lo más importante... ¿se convertirán los frutos de su trabajo en una merecida recompensa o en una suerte de maldición?

La fina línea que al empezar la novela divide a Victor y Eli irá convirtiéndose poco a poco en una brecha insuperable, pero lo cierto es que los hallazgos realizados en dicho campo continuarán ocupando la mente de ambos personajes hasta límites insospechados y en direcciones ideológicas radicalmente opuestas. No obstante, si en algo han de coincidir este par de alumnos aventajados es en su flagrante inestabilidad emocional, detalle que les irá haciendo intercambiar constantemente sus respectivos papeles de villano y héroe. Aunque por supuesto, Victor y Eli no serán los únicos que tengan algo que decir. También conoceremos a Sydney y Serena, dos hermanas tan diferentes por dentro como parecidas por fuera, y a Mitch, una impresionante mole de músculos que hace las veces de guardaespaldas de Victor; todos ellos personajes secundarios igual de atractivos, relevantes, bien definidos y con su propia historia que contar ¿me oís gritar? En definitiva, puedo decir que Vicious es una lectura altamente estimulante y recomendable, una idea bastante trillada como la de gente con superpoderes, pero tratada de una forma original, atrevida y escrita con un estilo soberbio (irónico, armonioso, lapidario) que puede sorprender incluso a los más asiduos al género. A pesar de sus flaquezas, como por ejemplo un final apresurado o una cierta tendencia a la redundancia argumental, Vicious cuenta con tantas otras virtudes que solo nos queda la opción de perdonar. Al fin y al cabo, ¿no somos todos humanos?

Puntuación

Vicious, Victoria Schwab


IMM 52#

domingo, 15 de junio de 2014

"In my mailbox" es una sección nacida en Pop culture Junkie y que se extendió gracias a The story siren. Consiste en mostrar cada cierto tiempo los últimos libros adquiridos, ya sea comprados, regalados o enviados por parte de alguna editorial.




Dicen que la mejor forma de evitar la tentación es caer en ella. Algunos consiguen sobreponerse y levantar cabeza. Otros se las ingenian para no pisar nunca suelo resbaladizo. En nuestro caso, no existe fórmula matemática capacitada para contabilizar todos y cada uno de los tropiezos que periódicamente exponemos de manera pública. A veces, con la misma piedra. Y es que cuando un libro te entra por el ojo, ni siquiera la insolvencia es excusa suficiente para ignorar ese maquiavélico canto de sirena que susurra en nuestro oído el objeto codiciado. Buscas alternativas. Te justificas. Te engañas. Crees que el mundo modifica su eje para poder girar en torno a un nuevo hallazgo literario. Y de repente, sin saber muy bien cómo, lo tienes en tus manos. Caes de nuevo. Listo para remontar el vuelo.



-Sueños de dioses y monstruos, Laini Taylor: Por fin llega el cierre de una de las trilogías más interesantes que ofrece actualmente el panorama juvenil, una saga que ha ido ganándose cada vez más adeptos gracias a las encantadoras criaturas que en ella habitan y que en mi opinión mejoraba de forma considerable en su segunda entrega. ¿Perpetuará Sueños de dioses y monstruos esa tendencia ascendente? No me cuesta reconocer que es uno de los libros a los que más ganas tengo de hincarle el colmillo.


-Máquinas del tiempo, Nina Allan: Por sorpresa nos llega desde la editorial Nevsky este prometedor relato de Nina Allan que sirve de aperitivo a esa otra novela que Fata Libelli planea lanzar este mismo año bajo el título de Spin. Para los despistados, Máquinas del tiempo esconde tras su preciosa portada la historia de un hombre que en sus investigaciones sobre la naturaleza del tiempo descubrirá ciertos secretos sobre el complejo funcionamiento de dicha dimensión.


-Steelheart, Brandon Sanderson: La asombrosa hiperactividad creativa del escritor norteamericano se traduce en un goteo constante de novelas que nos van llegando a modo de remedio contra la parsimonia de otros grandes títulos que tardan más en salir del horno. En esta ocasión, héroes y villanos con temibles superpoderes se dan cita en una epopeya moderna que combina las implicaciones éticas de Vicious y el irresistible encanto mainstream de los X-Men (por poner un ejemplo). 


-Goliath, Scott Westerfeld: Otra trilogía que dice adiós y a la que indudablemente echaré mucho de menos. Scott Westerfeld está sin duda entre mis autores preferidos de literatura juvenil, y es ni más ni menos que por el irresistible gancho que poseen sus historias y el encantador desparpajo que derrochan sus personajes. Goliath pone así punto y final al conflicto entre criaturas manipuladas genéticamente y alta maquinaria bélica de tintes steampunk que viene siendo el tema central sobre el que gira esta visión reinventada de la Primera Guerra Mundial. Podéis leer la reseña de los anteriores, Leviathan y Behemoth.


-Después del terremoto, Haruki Murakami: Como si de un devastador e inesperado seísmo se tratase, mi primer contacto con la obra de Murakami abrió una inmensa brecha en mi vida que a partir de ese momento la dejaría partida por la mitad. En el Antes y el Después. Tres años y catorce libros más tarde, Murakami regresa a mis manos (aunque ya lo leí en formato electrónico) para travestir de ficción la desoladora realidad de quienes sobrevivieron en 1995 al terremoto que sacudió la ciudad de Kobe. Seis historias breves, punzantes e impregnadas del inconfundible estilo del escritor japonés que intentan recoger la magnitud de un desastre capaz de sobrepasar cualquier escala. 


-La estrella más brillante, Marian Keyes: Hace demasiado tiempo que no cae en mis redes una novela de Marian Keyes y desgraciadamente se me están acabando las oportunidades de volvérmela a encontrar. Porque Marian es una droga de la que ni siquiera la abstinencia puede desengancharte. Hasta en la más prestigiosa clínica de desintoxicación desconocen la cura para librarse de las hermanas Walsh. Por suerte, uno tiene buenos amigos capaces de proveerte en el mejor momento una raya especial para consumir de forma recreativa. Y así, uno acaba como inquilino en el 66 de la Calle Star, una extravagante comunidad de vecinos al más puro estilo 'Aquí no hay quién viva' que está a punto de recibir la visita de un agente inesperado. Y no, no somos nosotros.   


-Rayuela, Julio Cortázar: Este libro no necesita ninguna carta de presentación: prometí a principios de año que no pasaría 2014 sin haberlo leído y en pleno ecuador del calendario ya puedo decir que ha encontrado su sitio en mis estanterías. Una novela que se recorre en sentido contrario, que empieza por el principio pero no acaba por el final. Y a lo largo del trayecto, uno asume el riesgo de perderse entre infinidad de posibles lecturas. ¿Quién dijo que jugar era solo cosa de niños?


Y una vez más, hasta aquí llega el IMM de hoy. ¿Habéis tenido la oportunidad de leer alguno de estos libros? ¿Cuáles son los que más os llaman la atención? ¡No te olvides de dejar tu comentario! Nos vemos en la próxima entrega de In my mailbox.


The Bone Clocks de David Mitchell

viernes, 13 de junio de 2014

Desde hace ya bastante tiempo sabemos que David Mitchell, aclamado autor de obras tan extraordinarias como El bosque del cisne negro o El atlas de las nubes, había terminado de trabajar en su nueva novela y que solo faltaba confirmar su fecha de publicación. Pues bien, marcad en rojo el próximo 2 de septiembre en vuestro calendario editorial porque ese será el día en que Mitchell aterrice de nuevo en las estanterías de medio mundo con la prometedora historia recogida en The Bone Clocks, una propuesta original, atrevida y enigmática en la que seguiremos los pasos de una muchacha llamada Holly Sykes a lo largo de su extravagante vida. Una vida en la que tomarán partido poderosas fuerzas sobrenaturales y donde los límites de la realidad no estarán demasiado delimitados. ¿A que pinta fenomenal? Aquí os dejamos con la portada que el propio autor ha dado a conocer en los medios, acompañada de una breve sinopsis: 



One drowsy summer’s day in 1984, teenage runaway Holly Sykes encounters a strange woman who offers a small kindness in exchange for ‘asylum’.  Decades will pass before Holly understands exactly what sort of asylum the woman was seeking...
THE BONE CLOCKS follows the twists and turns of Holly’s life, from a scarred adolescence in Gravesend to old age on Ireland’s Atlantic coast as Europe’s oil supply dries up – a life not so far out of the ordinary, yet punctuated by flashes of precognition, visits from people who emerge from thin air and brief lapses in the laws of reality.  For Holly Sykes – daughter, sister, mother, guardian – is also an unwitting player in a murderous feud played out in the shadows and margins of our world, and may prove to be its decisive weapon.

Reseñas breves [48-50]

jueves, 12 de junio de 2014

Esta noche arderá el cielo, Emilio Bueso 
Salto de Página - 288 páginas - 18.00 € - ½

Quizá en el momento de su publicación Emilio Bueso era todavía una estrella indie dentro del panorama nacional, pero a día de hoy resulta casi inconcebible que algún aficionado a la fantasía o ciencia-ficción patria no haya oído hablar maravillas de este escritor castellonense que acaba de sacar al mercado nueva novela en el sello Insomnia de Valdemar y que participa en el ambicioso proyecto distópico preparado por el sello Fantascy en Mañana todavía. Sea como fuere, con este libro queda claro por qué Bueso ha ido ganándose a pasos agigantados un hueco de honor en las estanterías de los habituales a la literatura de género, y es que Esta noche arderá el cielo es con toda seguridad una de las novelas mejor escritas que tuve la ocasión de leer el año pasado y además una de las que más enganchado me tuvo. Fue un viaje intenso, frenético y repleto de sorpresas a través del corazón helado de la Trans-Taiga que mezcla de manera arriesgada pero satisfactoria una multitud discordante de géneros. Los demoledores golpes de efecto que se guarda Emilio Bueso a la vuelta de cada curva, la excepcional caracterización de unos personajes controvertidos y macarras hasta la médula o el admirable ejercicio de suspense en tono apocalíptico que palpita en cada página de la novela harán que te mantengas pegado a la historia de Esta noche arderá el cielo como si te fuera la vida en ello. ¿Necesitáis más razones para salir corriendo a por este fantástico libro?


Siempre lecturas no obligatorias, Wisława Szymborska
Ediciones Alfabia - 252 páginas - 19.00 € - ½

La poetisa, ensayista y premio nobel polaca Wisława Szymborska fue una mujer que indudablemente tenía mucho de lo que hablar. En sus textos se percibe con flagrante facilidad el caudal de conocimientos que atesoraba Szymborska y el ingenio lúcido, luminoso, que derrocha cuando es la página escrita la que le toma la palabra. A lo largo de Siempre lecturas no obligatorias, el tercer volumen que publica Ediciones Alfabia de su prosa reunida, encontramos infinidad de pequeñas píldoras en forma de reseñas, artículos o prólogos a otros libros donde Wisława Szymborska ofrece su opinión experta en materias tan dispares como la aristocracia polaca, la genialidad sin precedentes de Dickens, la problemática inherente a una traducción defectuosa, el inmortalizado estatus social de Pompeya, la importancia de aprender a recitar en las escuelas, la meteorología o incluso la vital necesidad de tomar café para despertar la productividad de todo ente creativo. "¿Con qué se activaba Platón cundo se despertaba medio atontado por las mañanas?", pregunta Szymborska ante la fiel expectación de un público entregado a sus brillantes cavilaciones. De apenas un par de páginas de longitud, todos y cada uno de los textos aquí recogidos resultan perfectos para leer de manera ocasional y dejarse llevar plácidamente por una de las mentes más inquietas de las letras europeas, aunque la excesiva heterogeneidad de lo expuesto a veces impida esbozar una visión sólida y más enriquecedora de sus reflexiones.


Niños en el tiempo, Ricardo Menéndez Salmón
Seix Barral - 224 páginas - 17.50 € - ½

Pocos libros son capaces de provocar un impacto tan devastador que tardes meses en superar aquella primera impresión indeleble, pero lo cierto es que la última obra de Menéndez Salmón hasta la fecha es una de esas irrepetibles lecturas que dejan más un cráter que una huella. Es fácil, gratificante y altamente comprensible dejarse arrastrar por la prosa granítica, demoledora, del autor; más aún teniendo en cuenta el objeto de sus deliberaciones narrativas: la inconsolable pérdida de un hijo y la consiguiente brecha que abre en un matrimonio incapaz de soportar dicha tragedia. No obstante, este La herida no es más que el primer relato sobre el que se articula la esencia de la novela, un acto dividido en tres partes que convergen al final del libro y que no hacen sino confirmar la extrema brillantez de un escritor que ha logrado construirse un universo literario muy propio, consistente, inconfundible y definido. La cicatriz constituye una arriesgada y exitosa (solo a medias) incursión fabulada en la infancia de Jesús, un período en la vida del profeta obviado en gran parte por las Escrituras e imbuido aquí de significado por el indomable talento estilístico de Menéndez Salmón. En última instancia, La piel simboliza el reencuentro melancólico con los compases primerizos de la novela a través de una historia mucho más luminosa, más esperanzadora, más emocionante y desde luego, mucho más reveladora. Después de acabarlo, uno tiene la sensación irrefutable de que la más reciente obra de Menéndez Salmón es un estupendo despliegue de talento por parte del escritor asturiano y una imprescindible zambullida en las aguas negras de la soledad, el desamparo y la presencia inamovible de los niños en el inmenso caudal de la memoria, de la historia... del tiempo. Enormemente recomendable.


Resumen [Mayo 2014]

miércoles, 11 de junio de 2014

Resumen Mensual no es ni más ni menos que un breve repaso de las lecturas que han pasado por nuestras manos, sus correspondientes reseñas, progreso de los diferentes desafíos y otras noticias similares.





Libros


2. Ampliación del campo de batalla - Michel Houellebecq ½

3. Los tiernos lamentos - Yoko Ogawa ½

En mi extenso y fructífero recorrido por la literatura contemporánea de origen nipón, Yoko Ogawa es una mujer que tenía asegurado un hueco importante a pesar de no haberlo encontrado hasta el momento. Los tiernos lamentos, la más reciente obra que nos llega a España de la escritora japonesa, ha sido una primera incursión en la amplia producción literaria de Ogawa bastante satisfactoria y exquisita, pero no del todo arrebatadora. La historia que nos propone la autora en este libro es la de una joven calígrafa llamada Ruriko que, superada por la infidelidad de su desconsiderado marido, decide abandonar su estilo de vida en Tokio y huir a un refugio rural enclavado en una zona montañosa. Allí conocerá a Nitta, un misterioso y bohemio fabricante de clavecines cuya prometedora carrera como intérprete se vio truncada de manera irreversible, y a su ayudante Kaoru, una enigmática muchacha con cierta tendencia a obsesionarse con sus intereses hasta límites enfermizos. Y así transcurre lentamente una deliciosa novela en la que prevalecen los medios tiempos y los silencios penetrantes, una historia que se cuece a fuego lento y donde los protagonistas despliegan su creatividad artística para afrontar, resolver o incluso enmascarar sus respectivos dramas personales en medio de una atmósfera tensa cuyas posibilidades de estallar aumentan in crescendo. No he llegado a encariñarme con ninguno de los personajes durante la lectura y el tono general de la narración me ha parecido demasiado contenido, pero de todas formas, Yoko Ogawa demuestra tener una sensibilidad especial a la hora de bucear en las profundidades de la psique humana y sobre todo cuando se trata de desenterrar los sentimientos más profundamente resguardados en nuestro corazón, como si aún no hubiéramos aprendido que no hay mejor modo de curar el dolor, de hacer desaparecer las cicatrices, que hurgando profusamente en la herida.


4. La noche que nunca acaba - Edward Hogan ½ 

Este libro es el perfecto ejemplo de que una novela breve puede llegar a hacerse terriblemente larga. De hecho, podríamos sustituir sin problemas el título de la obra por 'La historia que nunca acaba' y tendríamos una portada que casa perfectamente con el contenido insustancial e insípido que guarda en su interior. Y no es que el estropicio de Edward Hogan empezara con mal pie precisamente: la historia de un adolescente acomplejado que se siente responsable del divorcio de sus padres y del alcoholismo incipiente de su progenitor no es quizá la premisa más original del mundo, pero lo cierto es que Hogan presenta unos personajes cercanos, bien definidos y carismáticos que consiguen acaparar la atención y el interés del lector de manera poco corriente. Preparados para iniciar una especie de terapia familiar en el interior de un complejo deportivo, Daniel y su padre irán transformando los términos de su relación a medida que vayamos conociendo más detalles sobre sus respectivas personalidades y su forma de comportarse con los restantes inquilinos de Mundo Ocio. Pero todo comienza a trastornarse cuando entra en escena una chica llamada Lexi y a raíz de su aparición empieza a sucederse una serie de acontecimientos con cierto aire de suspense poco menos que paranormales. Sin embargo, no es la interacción de elementos reales con otros de origen inexplicable lo que me hizo perder completamente la fe en la novela de Hogan, sino el tratamiento apresurado, ilógico e incluso absurdo que se hace de todo el meollo que se desata. Y no solo carecía de sentido la narración, es que además durante la segunda mitad de la obra me aburría como una ostra. No obstante, prefiero resaltar el mensaje positivo y optimista que este título lanza sobre temas como el perdón, la importancia de los lazos familiares y la aceptación de uno mismo, porque en se sentido La noche que nunca acaba sí que merece la pena.


5. Snuff - Chuck Palahniuk ★ 

6. El fin de los sueños - Gabriella Campbell & José Antonio Cotrina 

7. Tenemos que hablar de Kevin - Lionel Shriver ★ [MEJOR LECTURA]

10. Condenada - Chuck Palahniuk ½

Mayo ha sido el mes en que aparentemente se desató en mí la fiebre Palahniuk. Da hasta un poco de vergüenza admitirlo (quien esté acostumbrado a las lindezas escatológicas de este señor sabrá por qué), pero leer las soberanas guarrerías de Chuck supone un pasatiempo cada vez más estimulante. No sé si es por su imaginación pervertida, por la hilarante comicidad de un estilo que hibrida temas de seriedad absoluta y sueños de pedófilo empedernido o por la facilidad con que sus habituales vueltas de tuerca te dejan completamente noqueado, pero Chuck tiene una capacidad extraordinaria para convertir las miserias humanas en un festival orgiástico de dramas y comedias que despiertan en el lector una especie de... visceral asombro. En esta ocasión, la bajada a los infiernos (no en sentido metafórico) de Maddison, una joven adolescente, con problemas de sobrepeso e hija de unas extravagantes estrellas del rock que se preocupan más por salir bien en la tele que por la propia Maddison, supone el punto de partida de una novela realmente descacharrante que reinventa nuestra visión acomodada y burguesa del tormento eterno. En ella, Maddison acompaña a un grupo de almas condenadas en su recorrido por los lugares más emblemáticos del reino satánico para descubrir que los métodos tradicionales de castigo han sido sustituidos por montañas de pañales desechados e interminables encuestas de telemárketing. Ingenioso, polémico, gamberro, irreverente... Condenada reúne una vez más todos aquellos elementos que han hecho de Palahniuk un escritor de talla internacional, un escritor que no solo sabe tirar de humor sucio sino que derrocha lirismo ultra concentrado y es capaz de imaginar escenarios, situaciones y diálogos sencillamente memorables. Sin embargo, a pesar de sus numerosas virtudes, se nota que la última obra de Palahniuk carece de ese algo especial, ese descaro definitivo que sí tienen otros de sus títulos anteriores. Llamémosle chispa. Llamémosle alma. Sea como sea, parece que bajar al Infierno no está exento de riesgos.


11. Sic Transit - Reggie Oliver ½

Aunque ya habíamos tenido ocasión de disfrutar de Reggie Oliver en uno de los apasionantes relatos que aparecen en Sui Generis, la editorial digital Fata Libelli nos ofrece ahora la excepcional oportunidad de paladear en solitario los inquietantes, terroríficos y retorcidos mundos de este escritor británico aficionado a los cuentos de miedo y a las situaciones que escapan a nuestro control. Bajo el subtítulo 'Cuentos de fantasmas', Reggie Oliver despliega su enorme talento literario a lo largo de seis piezas sencillamente imprescindibles donde los espíritus errantes no arrastran cadenas ni se esconden bajo sábanas blancas. En su lugar, Oliver transforma la naturaleza cotidiana de la realidad para inducir en sus protagonistas un estado de extrañeza, perplejidad y desconcierto que les llevará a cuestionar los límites mismos de su cordura. Entre otras cosas, los cuentos de Oliver destacan por la embriagadora exquisitez de su prosa, el asfixiante embrujo de sus claustrofóbicas atmósferas y un cuidadísimo dominio del tempo narrativo que al final se traduce en una demoledora explosión capaz de reverberar durante bastante tiempo en tu cabeza. Pero quizá lo más asombroso de esta fabulosa antología, muy cuidada en el aspecto editorial y con una impecable labor de traducción a sus espaldas, sea la forma en que el autor consigue ponerte la piel de gallina sin recurrir a los tópicos ni lugares comunes más frecuentes del género. Puede ser que después de Sic Transit sigas sin tenerle miedo a la oscuridad. Puede que aún te sientas cómodo caminando por una avenida solitaria. ¿Pero podrás decir lo mismo la próxima vez que te mires al espejo en una habitación vacía? ¿O cuando ese simpático vecino que siempre saludaba te llame por teléfono reclamando tu alma?


12. Vicious - Victoria Schwab ½

13. Oliver y Max - Ángela Armero 

Parece que la editorial Nube de Tinta comienza a especializarse en literatura de temática bélica a golpe de títulos como este o el anterior Quedaos en la trinchera y luego corred, novelas dedicadas a un público middle grade que comparten cierta e inevitable similitud con aquella obra que a todos se nos viene a la cabeza cuando palabras como 'niños' y 'régimen nazi' comparten espacio en la misma frase. No obstante, el debut en solitario de Ángela Armero se distancia lo suficiente de sus más inmediatos referentes como para poder hablar de originalidad en aspectos como el esbozo de los personajes o la resolución de los distintos conflictos que se plantean, aunque no en la perspectiva edulcorada e infantiloide de los temas que se tratan. La historia corre a cargo de un niño llamado Oliver que es separado de su padre (prestigioso chef de cocina que trabaja para las tropas alemanas) tras un violento atentado en las calles de Berlín. A partir de ese momento, la narración va alternando entre la vida de ambos protagonistas y la desesperada odisea que han de atravesar para reencontrarse de nuevo mientras los trágicos horrores de la dictadura impuesta por Hitler van desfilando ante la impasible mirada del lector. Impasible porque aun gozando de cierta gracilidad estilística y alguna que otra sorpresa argumental, Oliver y Max no alcanza a ofrecer más que una lectura entretenida, trivial y de trascendencia efímera que deja un poso bastante tibio en quien se anima a compartir un par de horas con ella.


14. Siempre lecturas no obligatorias - Wisława Szymborska ½

15. El maestro y Margarita - Mijaíl Bulgákov ½


  • Lilith

16. No saldré vivo de este mundo - Steve Earle 

17. El curioso caso de Benjamin Button - F. Scott Fitzgerald ½

19. Breathe - Sarah Crossan ½

20. El sentido de un final - Julian Barnes 


 
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